
¿Qué es un seguro?
En la sociedad actual, la noción de “riesgo” está presente en casi cualquier aspecto de la cotidianidad. La muerte, la enfermedad, la discapacidad, el hambre, las catástrofes naturales, los accidentes, la vejez, los actos malintencionados de terceros, entre otros riesgos; son fenómenos que han forjado desde la concepción la manera como las personas se adaptan en el mundo en el que viven.
Un seguro es un contrato de transferencia de riesgos. Su objetivo principal es minimizar los perjuicios derivados de un hecho súbito e imprevisto.
Existen dos clases de seguro según el tipo de riesgo. Por lo general, en la industria clasificamos los riesgos en dos tipos:
- Riesgos Naturales: aquellos que son intrínsecos a la existencia del ser. Es decir, aquellos asociados a las condiciones biológicas del ser humano y de los cuales no puede prescindir por la naturaleza de su mundo: ejemplo de ello: el hambre, la enfermedad, la incapacidad, la vejez o/y la muerte.
- Riesgos Generales: asociados a los daños que sufren las cosas materiales y que pueden ser sustituidas con una cantidad determinada de dinero. Ejemplo de ello: un carro, una casa, una máquina, un edificio.
Puede que no sea el mismo carro, ni la misma casa, pero puedes adquirir eventualmente otra casa, otro carro… lo que no pasa con los riesgos naturales. Esta es la razón principal de su discriminación y su historia difiere en su concepción.